miércoles, 25 de octubre de 2023

Diario. 24 de octubre de 2023

 martes, 24 de octubre de 2023

8:05

Wasap a Jaime. ¿Nos vemos esta noche?

8:12

Abro la iglesia.

Oficio de lectura y laudes. 

8:45

Wasap a Jaime. Que sí, que voy a dormir a su casa. 

8:50

Evangelio de san Juan. 

9:25

Aviso en las listas de difusión de la parroquia y de la capellanía y en enl muro de Fbk. Mañana no habrá misa en el hospital y la misa en San Miguel será a las 18:00, si Dios quiere. 

Voy a la casa abadía y recojo la ropa que tendí ayer. 

Pastilla rosada. 

10:00 

Voy para iglesia. Vuelvo sobre mis pasos porque he olvidado el ordenador. Lo recojo y, ahora sí, voy a la iglesia. 

Como hoy no viene Joan, registro los libros y pongo el misal en el altar. 

Llega Teresa. Nos saludamos. Me pongo la sotana y voy al confesonario. 

Tercia. 

Alguien llama a la puerta del confesonario; no a la de los penitentes sino a la del confesor. Digo que pase, se abre lapuerta y veo a Bernardo. Nos saludamos.  «Yo sé —me dice—, que la iglesia es para todos. Pero esa señora gorda que vino ayer no me gusta nada». No sé a quién se referie, pero imagino que tuvo ayer un problema con alguien. «¿A quién te refieres?»—pregunto. Y él: «A esa tía gorda que vino ayer». No aporta más información. Inmediatamente, añade: «San Francisco Javier, deme la bendición». Me pongo de pie y extiendo las manos: «Por la intercesión de san Francisco Javier, te ruego, Señor, que envíes tu bendición sobre Bernardo para que sea amable con los gordos y con los flacos y, así, te agrade en todo». Y, haciendo la señal de la Cruz sobre él: «En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo». Y él: «Amén. Ya sabe que no quiero que se vaya de la parroquia ¿eh?». Y yo: «Pues pídele a Dios que nos conceda muchos años más en San Miguel». Se va. 

Alguien llama a la puerta del confesonario. Es Teresa. Que Alfredo  me espera en la sacristía. Hay que organizar algunos detalles para las confirmaciones del día 18. Me pregunta por las lecturas de la misa. Le aconsejo que descargue la App del Conferencia Episcopal. Sigue mi consejo y halla las lecturas. Me muestra el esquema de la celebración que ha preparado. Ponemos fecha para hacer un ensayo con los cuatro confirmandos.

11:04

Empieza la misa con cuatro minutos de retraso.

Al final, recuerdo a todos que, mañana, la misa será a las seis de la tarde. 

11:30

En la sacristía, Teresa me habla de la misa de santa Cecilia. Este año no puede celebrarse el sábado anterior por la tarde, porque hay confirmaciones. Teresa va a ofrecer a los músicos la posibilidad de celebrarlo el sábado por la mañana. Me estoy despidiendo de ella cuando veo, detrás de la imagen de San José, la máquina de afeitar que había perdido. Me felicito. 

En la puerta de la iglesia, Carmen y Gloria comentan con pena las noticias que llegan de Tierra Santa. Charlamos. Nos despedimos. 

11:45

Preparo mi maletita. 

12:00

Ángelus. 

Envío a Emma y Ángel la catequesis décimatercera.

Tengo veinte mensajes de WhatsApp pero ahora no es el momento de ponerse a chatear. 

Voy al gabinete azul. Me quito el zapato del pie derecho derecho y lo limpio. Me lo vuelvo a poner. Hago lo mismo con el izquierdo. Me lavo las manos. 

Bajo las persianas, cierro las ventanas, me ataca un mosquito y desinsecto la casa. 

12:36

Salgo con mi lujoso Seat León rumbo a Madrid. Misterios dolorosos.

El Realengo, Crevillente, Novelda, Sax, Villena, Almansa.

14:00

Paro en el restaurante Don Pepito de la Mancha. Llevo algo menos de hora y media de viaje y me quedan 323 kms hasta mi destino. Voy bien. Pincho de tortilla, choricito y pan. Con  Coca-Cola. 

14:30

Reanudo el viaje. Planeo parar en El Hito, a cien kilómetros de Madrid.  Buena ocasión para oír La creación de Haydn. 

16:50

Paro en El Hito. Pongo gasoil. Pido un café. Aprovecho para contestar wasaps. Pago el café y me dirijo al coche. ¿Dónde están las llaves del coche? En la barra, no. En la gasolinera, no. ¿En el coche? Sí. El coche se ha quedado abierto y con las llave puestas. Muy bien. 

17:30

Reanudo el viaje. El geolocalizador me dice que llegaré al Auditorio Nacional a las 18:13.

En Rivas empieza a llover. No he traído paraguas pero me alegro. 

18:15

Aparco en el Auditorio Nacional. Tengo tiempo de sobra. 

Homilía en YouTube: Para que todos se salven. 

19:00

Mando un wasap a don Paco para recordarle que estoy fuera.

Salgo del coche y voy Auditorio. Me encuentro con Armin y Heidy. Vamos a nuestras butacas. Llamada telefónica de Pablo: «¿Qué haces en mi concierto? Deberías estar trabajando». Yo, un poco desconcertado: «¿Cómo sabes que estoy aquí?» Él: «Estamos tres filas detrás de ti». Me vuelvo y, en efecto, allí están Pablo, Patricia e Ignacio. Nos saludamos.

19:30

Empieza el concierto de la Filarmónica de Londres. Primero un divertimento de Bartock y un concierto para violín y orquesta —Mil y una noches en el harén— de F. Say.

En el intermedio Armin, Heidy y yo salimos a charlar con Pablo, Patricia e Ignacio. 

En la segunda parte, la Filarmónica interpreta la Séptima Sinfonía de Ludwig. 

Termina el concierto y nos vamos a cenar a El lobo. Teníamos mesa reservada para tres pero se han unido otros tres. Nos dan u a mesa de seis. 

Muy bien. 

Después de cenar nos despedimos de Patricia, Pablo e Ignacio. 

Llevo a Armin y Heidy al Hotel Mediodía y sigo hasta la casa de Pupé y Jaime. 

miércoles, 25 de octubre de 2023

00:45

Me abre la puerta Pupé. Urraquita está frita y Jaime tiene la gripa. Me tomo un vaso de agua y escribo esto

2 comentarios:

  1. Maravilloso objetivo de um viaje.Yo,salvando dificultades,voy a vacunarme.

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  2. (Javier) Hace usted pero que muy bien. :-)

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Es usted muy amable. No lo olvide.