San MIguel de Salinas
viernes, 29 de noviembre de 2024
8:30
Abro la iglesia.
Oficio de lectura y laudes.
Me siento ante el sagrario.
9:30
De vuelta a la casa abadía, primera sesión de WhatsApp. Hay veintidós mensajes que han ido llegado desde las 4:44.
Andrés me manda la biografía del Padre Eduardo Rodríguez y algunos audios de su predicación. Fue, por lo que se ve, un santo jesuita que recorrió la España de la posguerra predicando en misiones populares e invitando a todos a la reconciliación.
Correo. Llega el NODI del obispado. Lo ojeo. Pongo en el muro de Fbk el programa diocesano y lo veo a cámara rápida.
Veo en YouTube un comentario exegético a las lecturas del domingo.
10:45
Voy a la iglesia. Ordeno el altar para celebrar la misa cara al pueblo porque va a celebrar el arcipreste.
Cuando llega el arcipreste nos saludamos, nos despedimos y salgo para el hospital.
11:30
Me pongo mi bata blanca y subo por las escaleras a la habitación de FSL. Rezamos la Salve. Charlo durante un buen rato con Silvia y Juan Pedro que me muestran una bonita colección de fotos familiares.
Nos despedimos y voy a la habitación de Carmen. Está con una amiga.
12:15
Voy a la sacristía para esperar al técnico que va a revisar el aire acondicionado. Ángelus.
Llega el técnico. Se lama Leo (¿poldo? ¿vigildo? ¿ncio? ¿cadio?) y es muy simpático. Le doy la llave de la sacristía y quedamos en que me la dejará en recepción.
Sexta.
12:45
Salgo para San MIguel.
13:10
Llamo a Mavi. Quedamos en la iglesia a las dos.
Termino la lectura del capítulo 3 de san Marcos.
Lectura de El Señor, de Guardini.
13:45
Lectura de La cena del cordero.
Segunda sesión de WhatsApp. Veinticinco mensajes.
14:00
Voy a la iglesia. Mavi y Henares ya han llegado y están mirando fijamente al sagrario. Nos saludamos y vamos al mesón El Prado que está lleno de seres humanos. Mavi me dice que los viernes no come carnes. La felicito y pedimos merluza a la plancha. Henares sí come carnes los viernes y pide un arroz con pollos. Me cuentan muchas cosas.
16:00
Acompaño a Mavi y a Henares a su coche, nos despedimos y voy a la iglesia donde me esperan Armin y Ana Isabel para hacer algunos preparativos del Concierto de Adviento.
17:00
Nos despedimos y mando a las listas de difusión de las parroquias los horarios del misa y del concierto del sábado. Mando también una minicatequesis a Carmen y a José María
17:16
Me siento ante el sagrario.
Se me acerca una señora y me pregunta que si se pueden encender velas en la iglesia. Le digo que sí. Me dice que le han dicho que no se puede. Le pregunto que si se lo ha dicho el obispo o el Papa. Se ríe y me dice que no, que lo dice la gente. Le digo que la gente inventa cosas y que solamente hay que hacer caso de lo que digan el obispo y el Papa. Nos despedimos. Promete volver con un cargamento de velas para alumbrar a los santos.
Sigo con mi oración.
17:46
Vuelvo a la casa abadía y escribo esto.
…
18:15
Salgo para Los Montesinos. Misterios dolorosos con Benedicto XVI.
18:30
Misa en Los Montesinos. En la plaza han organizado una especie de festejo navideño: All I want for Christmas is you, y eso. La música apenas deja oír a los lectores. El follón va in crescendo hasta que, en el momento de la consagración, se hace el silencio de repente. Acaban los fieles de aclamar con el «anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección…» y, otra vez, comienza el estruendo.
Terminada la misa veo que tengo una llamada perdida. Es de Wilder. Lo llamo. Maravillosa noticia: le han concedido la residencia después de casi cuatro años de papeleo, llamadas telefónicas y abogados. ¡Bendito sea Dios!
19:10
Vuelvo a San MIguel terminando de rezar los misterios dolorosos con BXV. Paso por Más y Más.
Voy a la iglesia. Vísperas.
19:50
Tercera sesión de WhatsApp: cuarenta y dos mensajes. Conforme voy leyendo y contestando van entrando otros.
20:05
Me preparo una cena ligera —queso de Mahón y pan— oyendo La brújula.
20:30
Retomo la lectura de Seréis como dioses.
21:00
No tengo que cerrar la iglesia porque va a ensayar el coro.
Completas.
Escribo esto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Es usted muy amable. No lo olvide.