martes, 25 de junio de 2024

Nosotros, los sofisticados


Acabo de ver, primero con curiosidad, luego con pasmo creciente y, finalmente, con emoción, Un ángel llamado Rebeca: un documental delicadísimo, realizado con una rara perfeccción y con una banda sonora excelente entre otras cosas por su falta de pretensiones efectistas. 

Lo extraño es que esa maravilla se dedique a dar voz a los vecinos de un pueblo de la Vega Baja de Alicante para que nos hablen de una niña alegre y lista que no quería ser monja sino catequista.

Imagino que cualquier anuncio de un perfume de Guerlain debe de costar cien veces más que esta obra de arte franciscana en la que se ha empeñado —literalmente— José María Zavala. 

«¿De Nazaret puede salir algo bueno?». Esta es una de las preguntas del evangelio preferidas por nosotros, los sofisticados. La hizo Natanael —alias Bernabé—  con burlona sinceridad. La otra es esta: «¿Qué es la verdad?». Esta la hizo Poncio —alias Pilato— con la socarrona superioridad que nos encanta a nosotros, los escépticos. 

El documental responde a las dos preguntas. Los vecinos de Granja de Rocamora han vivido más y mejor que los vecinos de Broadway sin darse pote. Y la verdad está al alcance de la mano de los que viven cerca de ella y podrán encontrarla  siempre y cuando —aviso para los vecinos de Granja de Rocamora y para los de Broadway y para nosotros, los sofisticados— la amen más que a sí mismos. 

4 comentarios:

  1. Es difícil hacer comentarios a esto.¿ Donde lo vio?.

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  2. Mientras sigamos siendo sofisticados(?) e imbeciles, Zabala remata contra corriente.

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Es usted muy amable. No lo olvide.