San Miguel de Salinas
Lunes, 10 de junio de 2024
7:15
Salgo, con quince minutos de retraso, para el hospital.
7:35
Preparo el altar de la capilla.
Oficio de lectura.
8:00
Primera misa por las almas del purgatorio porque es lunes.
8:35
Charlo con el doctor R.
Recojo todo.
Laudes.
9:10
Voy a la UCI para llevarle la comunión a Antonio. Esta vez me abren sin preguntar porque ven, por la camarita, mi bata blanca y mi alzacuellos. Antonio espera que lo lleven hoy a su habitación.
9:35
Salgo para San Miguel. Atasco en Torrevieja.
10:05
Llego a San Miguel. Paso el plumero por toda la casa abadía y cierro las ventanas.
10:30
Voy a la iglesia y me siento en el confesonario.
Tercia.
11:00
Segunda misa por las almas del purgatorio porque es lunes.
11:30
Desempaqueto la preciosa escultura de la Virgen, obra de Javier Magarit. La pongo en una mesita de la sacristía.
Joan quiere hablar conmigo. Charlamos.
Rezamos el Ángelus y nos despedimos.
Mando una foto de la escultura a Javier Magarit y a Patricia dándoles las gracias.
Leo algunos mensajes que han llegado por WtsApp.
12:15
Meditación con Haurietis Aquas.
12:50
Voy al banco para ingresar las colectas del fin de semana y para mandar al obispado algunas colectas imperadas. Hay cola. Tengo que devolver un recibo que ha cargado el obispado a la cuenta del cementerio. Tengo que volver a la casa abadía y, otra vez, al banco y, otra vez, ala casa abadía.
13:40
De vuelta a la casa abadía me encuentro con un vecino venezolano que me cuenta su peregrinación a Santiago. Al fnal se depide asina: «Relájate, descansa y sé feliz».
Anoto los movimientos bancarios en las cuentas parroquiales.
14:00
Voy a comer a casa de doña Nati.
14:45
Nos despedimos.
Visita al Santísimo.
15:00
Noticias en Antena 3. Me quedo frito.
15:45
Me entrego a la limpieza de la casa abadía oyendo a don Nicolás Álvarez de las Asturias. Muy bien.
17:00
Misterios dolorosos con BXVI.
17:25
Hay que corregir una comunicación de matrimonio para el juzgado. Como no funciona la impresora, se la mando al archidiácono para que la imprima.
Hay que actualizar el libro de misas.
Hay que organizar —y desempolvar— la carpeta de las facturas.
Suena el timbre. Es Iván, el belga. Bajo para abrir la puerta y aprovecho para tirar la basura al contenedor.
18:00
Meditación con Haurietis aquas.
Vísperas.
19:00
Wasap al consejo de pastoral para convocar la última reunión del curso.
Wasap al archidiácono.
Wasap a Alfredo.
Wasap a la lista de difusión de la parroquia para comunicar que el viernes por la mañana y el sábado por la mañana no habrá misa en San Miguel. También pongo el aviso en el muro de Fbk de la parroquia.
Wasap de Fátima en el grupo de hermanos. Mi antigua admiración hacia ella se confirma primero y, luego, va creciendo. Como no sé que decirle —cada vez me cuesta más decir cosas— no le digo nada. Prefiero hacer una oración con la seguridad de que el Buen Dios dirá a cada uno lo que más convenga.
19:10
Limpio mis gafas. ¿Cuidadosamente? Sí, cuidadosamente. ¿Con líquido limpiador de pantallas planas y con una suave gamuza verde de la óptica San Miguel? Exactamente así.
Leo un capítulo de Barrio.
19:20
Leo unas páginas de La Nueva Jerusalén, de Chesterton, y me divierte encontrar una cita de Max Beerbohm.
19:30
Recojo el despacho y voy a casa de doña Nati para ver otro capítulo de The Crown.
El Paseo está animadísimo. Hay muchos niños jugando. Me detengo para charlar con Analía, Amabilidad y Antonio. Algunos niños de la catequesis —como gorriones— me saludan: «Don Javier, don Javier». Y otros corean: «Don Javier, don Javier». Los saludo con la mano izquierda porque llevo en la derecha el teléfono y el cargador.
Capítulo de The Crown en casa de doña Nati.
21:00
Me despido de doña Nati, voy a la iglesia, apago las luces y cierro las puertas.
El cielo se ha puesto gris y hay truenos. El Paseo ha quedado vacío y los pájaros han vuelto a tomar posesión de él. Joaquín está recogiendo la terraza del JJ. Le pregunto que si va a llover y me dice que dan lluvias para mañana.
En la casa abadía mepreparo una cena ligera.
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