Diario. Martes, 11 de junio de 2024

 San Miguel de Salinas

martes, 11 de junio de 2024

4:30

Me despierta un ruido como de truenos. No es una tormenta sino mis vecinos del piso de arriba que, al parecer, han madrugado y están arrastrando los muebles. 

Oficio de lectura de san Bernabé: In insula Cypro natus, inter primos fideles Ierusalem est annumeratus, Amtiochiae Evangelium praedicavit et, apostolo Paulo adhaerens, in primo itinere eum comitatus est. Concilio Hierosolymitano interfuit. In patriam reversus, Evangelium diffudit, ibique mortuus est. 

4:50

Vuelvo a acostarme. 

6:00

Suena el despertador. 

7:00

Hay cotorras en las palmeras del Paseo. Quizá por eso han huido los vencejos. En el suelo hay una par de charquitos y el cielo está ñublo. 

Laudes. 

Meditación con Haurietis aquas. 

7:50

Encuentro a Iván —el belga— tomando un café en la puerta de los locales parroquiales. Le pido que me acompañe esta tarde a La Torre para prepararel concierto. Quedamos en que pasaré a buscarlo a las 13:30, cuando termine de trabajar. 

8:00

Lectura del Evangelio de san Mateo. 

8:10

Hago un cartelito con el horario de misas de verano. Como no funciona la impresora, se lo mando a Wilder para que me lo imprima. 

Empieza a llover como anunció ayer Joaquín. 

Bajo a los locales para  buscar algunas partidas de bautismo. Los mosquitos acechan bajo la mesa para cebarse en mis tobillos. Antes de sentarme, lo fumigo bien todo. 

La primera búsqueda hay que hacerla entre 1915 y 1917. La partida no aparece. Observo que han sido arrancadas las siete últimas páginas del libro que, al parecer, contenían los índices. Miro en los años 1913 y 1914. Nada. 

La siguiente búsqueda hay que hacerla entre 1919 y 1921. Ahora, lo que no aparece es el libro XVIII de bautismos. Cuando, por fin, lo encuentro, veo que ese libro sí conserva los índices. La partida aparece enseguida. Se trata de un niño que nació en 1920 en Río Salado (Orán). 

Dejo aquí la búsqueda  y me dedico a ordenar los libros parroquiales y a hacer el índice. 

9:15

Tercia.

Lectura de los Sermones parroquiales de Newman. Sermón 16 «La cobardía religiosa» en la fiesta de San Marcos. ¡Vaya! ¡El primo de Bernabé! Pero Newman dice que era sobrino del apóstol chipriota.

9:35

¿Dónde está mi teléfono? ¿Lo habré dejado en los locales? Voy a los locales, y nada. ¿En el confesonario? Voy al confesonario, y nada. ¿En la sacristía? Saludo a Joan y recapacito. Tiene que estar en el despacho porque lo he usado allí para recitar tercia. Vuelvo al despacho y lo hallo debajo de los Sermones Parroquiales. 

9:45

Treinta y un wasaps. Iván me manda las coordenadas de su trabajo. Don Javier Mira me manda la Carta de Monseñor Lazzaro. Alfredo sugiere adelantar la reunión del Consejo de Pastoral. 

9:55

Siete correos. Borro seis. 

10:05

Recojo todo y voy a la iglesia. Está lloviznando y se me mojan mis zapatos nuevos que, por cierto, me aprietan un poco. Pero no me importa que se me mojen los zapatos nuevos: me gusta la lluvia. 

Me siento en el confesonario.

Lectura de Gracia de Cristo. 

Lectura de Cartas a los sacerdotes de Juan  Pablo II.

11:00

Misa. 

11:45

Joan quiere  hablar conmigo. Charlamos. 

12:45

Pongo una lavadora y salgo para Almoradí. De camino hacia el garaje leo  en  X —antes Twitter— los versos más tristes de don EGM. Se me ocurre un cuarteto decentico, lo escribo y se lo mando. Pero llevo toda la mañana teniendo problemas con los datos móviles. El tuit no sale y me da aviso de error. Como ya es tarde decido enviarlo más tarde. 

13:30

Llego a Almoradí y, miemtras espero a Iván, corrijo el cuarteto y lo mando. Ahora sí que sale. Recojo a Iván —el belga— en Almoradí y vamos a Torrellano. 

14:10

Comemos en Torrellano y salimos para La Torre. 

15:00

Preparamos cincuenta sillas para  el concierto en la almazara. 

17:00

Salimos de vuelta para San Miguel. Desde Elche hasta bien pasado Crevillente viajamos bajo un aguacero. En el área de servicio de El Realengo, paramos para tomar un café y  poner gasolina: solamente diez litros porque está a un dólar con cincuenta centavos  el litro. 

18.15

Llegamos a San Miguel y nos despedimos. 

Vísperas.

Tiendo la ropa dentro de la casa abadía porque puede volver a llover. Recojo una toalla que quedó tendida fuera y que hay que volver a meter en la lavadora. 

Limpio el Ra y lo pongo a trabajar. 

18:50

Escribo esto.

Anoto en mis cuentas los gastos del día.

Meditación con la semblanza de san Bernabé que trae La casa de los santos. 

19:50

Wilder me invita a cenar a su casa. Contesto a su wasap: ¿a qué hora?

Mientras espero su respuesta, leo un capítulo de Barrio.

Como he terminado el capítulo de Barrio y Wilder no ha contestado, me pongo a leer La Nueva Jerusalén, de Chesterton. 

Termino con Chesterterton y empiezo con Werner Jaeger. 

20:45

Suena el teléfono. Es Wilder. Que está en la puerta de la iglesia con Ana Isabel. Cenamos, charlamos y vemos un video de magia de mi hermano Pablo.

22:30

Nos despedimos.

Vuelvo a la iglesia.

Completas. 

Cierro la iglesia y vuelvo a la casa abadía.