viernes, 31 de mayo de 2024

Diario. Viernes, 31 de mayo de 2024

 San Miguel de Salinas

viernes, 31 de mayo de 2024

Hemos celebrado la Visitación en el hospital —a las 8:00— y luego, por todo lo alto, en San Miguel, a las 11:00, con Andrés al órgano. 

He tenido una larga y divertida conversación telefónica con el Padre Fortea.

Por la tarde, después del entierro de María, he preparado una sopa de cebolla para cenar en casa de Ana Isabel y de Wilder. 

jueves, 30 de mayo de 2024

Diario. Jueves, 30 de mayo de 2024

 San Miguel de Salinas

jueves, 30 de mayo de 2024


Nicole B es natural de Chile. Está casada y tiene tres hijos. Llegó con su familia a Barcelona y allí tuvieron una mala experiencia. Buscaron entonces un lugar más amable y barato para vivir y recalaron en San Miguel de Salinas donde se sienten muy felices. Pero Nicole tuvo un problema con su espalda, gastaron sus escasos ahorros en una operación que ha sido un éxito y ahora, sin trabajo y sin dineros, han tenido que acudir a Cáritas. Se presentó ayer en la iglesia con una misionera evangélica que venía a recomendarla. Intercambiamos nuestros números de teléfono y por la tarde, la llamé. Según me dijo, estaba ella orando, llorando y clamando a Dios cuando sonó su teléfono y apareció mi nombre en la pantalla. Quedamos en vernos hoy a las 9:00.

Hoy, a las 9:00, como estaba previsto, me he encontrado con Nicole. Es una mujer dulce y fuerte, muy inclinada a la risa, evangélica… Al parecer ha hecho suyo el lema deTeresa Arsuaga: «no dramatices». Al preguntarle que si su esposo es también evangélico me ha respondido con una sonrisa: «No, padre Javier… ¿Puedo llamarlo así? Mi esposo todavía no conoce al Señor». 

Hemos estado hablando durante una hora y media. Me he quedado con ese «todavía», con la dulzura y la risa de Nicole que me ha parecido como uno de esos gorrioncillos del campo por los que tanta simpatía sentía Jesús. 

A las 10:30, como de costumbre, he expuesto el Santísimo. Como de costumbre, Andrés ha incoado el  Pange lingua. Luego, a las 11:00 misa de la memoria de san Fernando. Y le he pedido a Andrés que vuelva mañana para celebrar  por todo lo alto la Visitación. 

Como es jueves, después de misa he salido para La Lloseta. Y he vuelto justo a tiempo para dar la bendición con el Santísimo en Los Montesinos y para celebrar allí la misa de 20:00. 

De regreso a San Miguel, pasando por un paraje solitario cerca del lugar  conocido como La Marquesa, me ha sorprendido —¡zas!— la revelación de un paisaje que parecía un cuadro de Jaime Lafuente Sansano. He aparcado el coche al borde de la carretera para contemplar el milagro: una vieja casa de adobe rodeada de altísimas palmeras y, al fondo, un sol poniente que incendiaba el cielo y anegaba en lágrimas mis ojos.

        Ya he vuelto a casa. Ahora voy a llamar a Prado para felicitarla por su cumpleaños. 

miércoles, 29 de mayo de 2024

Diario. Miércoles, 29 de mayo de 2024

 San Miguel de Salinas

miércoles, 29 de mayo de 2024


En la Casa de los santos encuentro a san Bona de Pisa. Muy bien, pero el día es de san Pablo VI. Lo celebro en las misas de 8 y de 11, lo recuerdo en la oración de la mañana y de la tarde meditando el Credo del pueblo de Dios y vuelvo a escuchar la preciosa conferencia que pronunció don José María Laboa en octubre de 2016 durante el homenaje al más elegante de los papas. 

Después de comer, doña Nati me ha tomado la tensión: 10,1 / 6,1.  

Iván, el belga, está contento —y yo también— porque le han hecho un contrato a tiempo parcial. 

20:30

Estoy viendo un episodio de The Crown con doña Nati. Llama Wilder. Que si puedo abrirle la sacristía porque va a tratar de arreglar el micrófono que no funciona. Le abro la sacristía. 

21:30

Estoy viendo las noticias con doña Nati y vuelve Wilder. Me despido de doña Nati y de Samira y acompaño a Wilder a la parroquia para ver el arreglo. Wilder está compungido porque, aunque ha soldado el cable a la clavija nueva, y aunque la luz del micro se enciende —señal de que tiene corriente— el micro no funciona. Pero sí funciona. Lo que pasa es que el volumen de ese micro está al mínimo. A Wilder se le ilumina la cara y nos despedimos. Yo dándole las gracias muchas veces y él bendiciendo mucho a Dios. 

Antes de despedirnos le propongo que le proponga un plan a Ana Isabel para el viernes. Yo preparé una sopa de cebollas y nos la zamparemos, para cenar, en su casa. Le parece bien. Llevaré cinco tostadas con la sopa: cuatro normales y una sin gluten para Luciana. Le parece bien. 


martes, 28 de mayo de 2024

Diario. Martes, 28 de mayo de de 2024

 San Miguel de Salinas

martes, 28 de mayo de 2024


6:00

Suena el despertador.

7:00

Abro la iglesia. Oficio de lectura y laudes.

8:05

Llamada de Wilder. Como su moto está en el taller, necesita mi coche para ir a Torrevieja y comprar una conexión nueva para arreglar la megafonía de la iglesia. 

Hay que mirar fijamente al  sagrario. Después de un rato así, sigo mi oración paseando por las capillas laterales. 

8:30

Entra Iván, el belga. Toma agua bendita y reza un poco. Charlamos. Teresa le ha conseguido una bicicleta. Cada día va a Almoradí —una hora de pedaleo— para trabajar media jornada. A la vuelta, dos horas de pedaleo. Está contento porque ha empezado a ahorrar. Su plan es comprar una furgoneta y vivir en ella hasta que pueda alquilar una habitción. 

Voy a la sacristía para preparar la misa.

Lectura del libro de los Salmos. 

9:00

Llega Wilder, charlamos y se lleva mi coche. 

Preparo y envío  una catequesis a Felipe. 

9:30

Voy a ver a doña Nati. Me toma la tensión: 9,3 / 6,3

Me invita a un café con leches y me cuenta que anoche, a eso de las once, un coche aparcó ante la puertadel garaje de la parroquia. Bajaron un hombre y una mujer. El hombre fue al cajero automático y la mujer llamó a la puerta de doña Nati. Samira, que había cerrado la verja, se acercó para ver que quería. Pedía una chaqueta. No le abrió la puerta. 

Wasap de un viejo amigo del cole. Que la promoción se reúne el 8 de junio y que estoy invitado a celebrar la misa. Que no podré ir, pero que celebraré esa misa por los compañeros en San Miguel. 

Wasap de Teresa que ha debido de leer el diario de ayer y, preocupada por mi tensión,  me aconseja encarecidamente que coma y que beba mucho y se ofrece a prepararme una pechuga de pollo. Quegracias pero que hoy comeré con doña Nati.

10:00

Saco la vajilla del lavaplatos, pongo una lavadora y pongo a trabajar al Ra. 

Oigo a Teresa que entra en los locales y llama a Iván: «Iván, Iván». Pero Iván se ha ido a Almoradí. 

10:25

Me llaman del juzgado de Torrevieja. Que hoy tenía que comparecer como perjudicado por el caso de la profanación. Me van a mandar un correo para que pueda renunciar a cualquier reclamación dado que los amables profanadores lo devolverieron todo y mostraron un sincero arrepentimeinto. 

Vuelvo a la iglesia. Hay que revisar la megafonía. Pongo un taburete delante del equipo y me siento. Lo enciendo. Hace ruido. Pongo al máximo los agudos, los graves, y todos los botones que encuentro. Gran estruendo. Agitación en la congregación que se va reuniendo. Empiezo a apagar, uno a uno, los botones que he puesto al máximo para ver de dóne viene el ruido. Viene de los botones en los que pone «altar», «pila bautismal», y «sede». Como allí no hay micrófonos, los dejo apagados y cesa el ruido. Desde la sacristía oigo el emocionado aplauso de la congregación. Pruebo el micrófono inalámbrico: «En el nombre del Padre…». Murmullos de aprobación. Joan entra en la sacristía: Fr you are a genius. Sonrío agradeciendo su moderado elogio y salgo para probar el micrófono del ambón: «En el nombre del Padre…».  Zvignev —el polaco—, Anne —la escocesa—, Teresa, doña Nati, Gloria y los demás congregados se felicitan. Me felicito. 

11:00

Empieza la misa votiva de los ángeles. 

11:30

Joan quiere hablar conmigo. Nos sentamos y me cuenta cosas. 

12:05

Vuelvo a la casa abadía. Ángelus. Sexta. 

Escribo algunas experiencias de la catequesis de este año para tener en cuenta el año que viene. 

Ahora sí, me concentro y leo treinta y cinco páginas de Ejecutoria. Observa EGM que Retorno a Brideshead «es, fundamentalmente, una profunda reflexión acerca  de… la pobreza. Todos los personajes se encaminan, casi guiados por un fatum clásico, no tanto al fracaso como a la pobreza finalmente aceptada como una culminación y una vía de acceso a una riqueza superior».

Hace poco he terminado de leer el Libro de Job. Cierro Ejecutoria y evoco la figura de ese hombre que, cuando rico, anda inquieto por si él o sus hijos han podido ofender a Dios y que luego, arruinado y enfermo, aparece como un señor enorme, como un sacerdote y rey ancestral, sentado sobre un montón de estiércol, rascando sus heridas con una teja y mostrando una perfecta y tranquila confiormidad: «Dios me lo dio. Dios me lo quitó. Bendito sea Dios». Como hizo notar Bouyer, la Biblia empieza mostrando las riquezas de la tierra como bendiciones divinas. Los patriarcas son bendecidos con camellos, dromedarios, ovejas, vacas y otros muchos bienes materiales y perfectamente contabilizables. «Isaías, que personalmente era un gran señor, da, sin embargo, una primera nota estridente en este sentido: ¡Ay de los ricos! Con Jeremías y los últimos salmos es el pobre, cuya riqueza única es la fe, quien viene a ser bendito de Dios. Jesús abrirá la boca para proclamar desde las primeras palabras del sermón de la montaña: Bienaventurados los pobres. Este será el tema latente en todo el Evangelio de san Lucas.  Y san Pablo nos resumirá toda la obra de Cristo diciendo que, por amor, siendo rico se hizo pobre para enriquecernos por medio de su pobreza». (La descomposición del Catolicismo).   

13:30

Saco la ropa de la lavadora y la tiendo. 

14:00

Voy a comer a casa de doña Nati. Ha sacado una botella de vino. Llevo una semana sin probarlo y no sé si mesentará bien. Doña Nati, tentadora, se sirve un vermú, me dice que el vino es muy bueno para subir la tensión y me recuerda que hoy hace tres meses que murió Paco. Abro la botella y brindamospor Paco. Me sienta bien. 

15:00

Visita al Santísimo. 

15:10

Noticias en Antena 3

15:30

Rosario.

16:00

Hay que dar la unción de enfermos a Milagros. Voy a la iglesia y salgo para la casa de Milagros con los óleos y  el Viático. Me reciben Mariana y su hija Yasmira. Son del Perú. Mariana cuida de Milagros y Yasmira suele pasar por allí para estar con las dos. Charlamos. Milagros no puede comulgar. Le doy la unción y les ruego que me inviten a beber un vasito de agua. Me invitan. 

16:45

Vuelvo a la iglesia, reservo el Santísimo y guardo los óleos. 

17:00

Leo un wasap de Salva: «Hola. Me han dicho que ha habido nombramientos. ¿Te mueven?». Chateamos. 

Respondo al correo del juzgado de Orihuela. En vista de que todo lo robado fue devuelto, tanto la diócesis como yo mismo renunciamos a cualquier acción civil o penal que pudiera correspondernos. 

Tengo que buscar una partida de bautismo que debe estar  registrada entre 1850 y 1865. Busco el libro en la iglesia y encuentro la partida. Teresa está dando catequesis. Cuando termina le pido que pase por el despacho porque faltan cuatro libros de bautismos. 

Charlo con  Francisco que ha venido a llevarse la bici que le prestó a Iván, el belga. Charlo con Iván, el belga. 

Encontramos los libros que faltaban. 

Me preparo un agüita con limón y miel. Desinsecto el despacho antes de entregarme a la búsqueda de más partidas. 

Leo el Boetín del obispado. En efecto han empezado a publicarse  los nombramientos. Chateo con Salva. 

El archidiácono me pide que le haga unas compras en Amazon. Se las hago. 

19.00

Vísperas. 

19:20

Voy a la iglesia para mirar fijamente al sagrario. 

19:45

Llega Wilder y  me devuelve las llaves del coche. 

19:55

Voy a comprar algunas cosas. Me encuentro con Teresa que va a montar el palio para el Corpus. Al volver me encuentro con Analía. 

Me preparo una cena ligera: macarrones con salsa cuatro quesos. 

20:50

Voy a casa de doña Nati. Me encuentro con Teresa: que acaba de hablar  con don DT. Doña Nati me toma la tensión: 9,7 / 6,1. Vemos el comienzo de la las noticias de las 10:00 y me despido porque tengo sueño. 

En la iglesia siguen organizando lo del palio. Les ruego que cierren cuando terminen. 

Completas. 

lunes, 27 de mayo de 2024

Diario. Lunes, 27 de mayo de 2024

 San Miguel de Salinas

lunes, 27 de mayo de 2024


4:00

Consigo dormirme con ruido blanco de fondo: un riachuelo. 

6:00

Suena el despertador. 

6:55

Abro la iglesia, enciendo las luces y salgo para el hospital. 

7:20

Preparo el altar y trato de concentrarme en el rezo de laudes. Imposible concentrarme. Es como si no entendiera nada de lo que leo. 

8:00

Misa. Hay que encomendar a tres enfermos terminales: D. N. y V. 

Imposible concentrarme durante la misa. En un momento determinado, el doctor S. me avisa de que me he saltado una parte importante. Vuelvo atrás. 

8:20

Intento concentrarme  en la acción de gracias. Nada. 

8:45

Estoy recogiendo todo y preparando la misa del miércoles cuando entra un ser humano. Se presenta. Charlamos. Lo van a operar el viernes día 7 y quiere que le lleve la comunión. Se queda para hacer un rato de oración. Yo también. 

9:15

Vuelvo a San Miguel. En la casa abadía, después de hacer el oficio de lectura sin entender nada, me preparo unas patatas al mogollón. 

10:00

Intento leer. Imposible concentrarme. Vuelvo una y otra vez a la misma línea de Ejecutoria. Me rindo. 

Pongo una lavadora y me dedico a ordenar el despacho oyendo una vida de san Francisco Javier. 

10:30

Voy a la iglesia. Saludo a Teresa, a doña Nati y a Joan. Doy vueltas por la sacristía con la mente tan en  blanco como la mesa, las paredes y las puertas de la sacristía que son blancas. Me acuerdo de Jeremías: tanto el profeta como el sacerdote vagan sin sentido por el país. 

11:00

Va a empezar la misa pero hay un zumbido en la megafonía. La desconecto. Celebro sin altavoces. 

11:45

Vuelvo a la casa abadía y me siento. Luego voy al banco y me siento. Luego voy a la peluquería y me siento. Luego voy a casa de  doña Nati y me siento para que  me tome la tensión. Está muy baja. 8,3 / 5,4

13:45

Vuelvo a la casa abadía. Imposible concentrarme en la lectura. Me pongo a ordenar y a tirar papeles y  me preparo una sopa de cebolla. 

15:00

Noticias en Antena 3. 

15:30

Rosario. 

16:00

Intento hacer un rato de oración paseando por las capillas laterales de la iglesia.  

16:30

Sé que, si intento ponerme a leer o a estudiar, me voy a dormir. Vuelvo a la casa abadía y me entrego, con furia, a fregar suelos y baños, a ordenar  armarios y a mover muebles mientras oigo una vida de san Pío V y unas conferencias sobre el Concilio de Trento. 

17:30

Vísperas. 

18:00

Me animo a poner al día las cuentas parroquiales. 

18:30

Voy a llevar la comunión a B. 

19:30

Por fin me siento para preparar una catequesis. Se la envío a Felipe. 

20:15

Me preparo una cena ligera: yogur y cuatro fresones.  

20:45

Voy a la iglesia a rezar completas. 

21:00

Voy a casa de doña Nati para que me tome la tensión. Me llevo mi termómetro nuevo. Me lo compararon Ana Isabel y Wilder cuando estaba en la cama. 

Tensión: 9,1 / 6,3

Temperatura: 

-Según el termómetro de doña Nati que es de esos que son como una pistola que lanza una luz roja a la sien: 36,9

-Según el mío: 35,6

21:10

Apago las luces y cierro las puertas de la iglesia.

lunes, 20 de mayo de 2024

Diario. Lunes, 20 de mayo de 2024

San Miguel de Salinas

lunes, 20 de mayo de 2024


7:00

17º C

A esta hora ya ha amanecido: no volveré a ver el sol naciente en mis idas al hospital… por unos meses. 

Me detengo para contemplar a los madrugadores gorriones que juguetean en El Paseo. 

Inspirado por Chesterton, imagino que son las almas de los gorriones de Londres y de otras grandes ciudades viviendo en el lugar al que van los gorriones buenos. 

7:20

Llego al hospital, aparco, me bajo del coche, lo cierro y, como de costumbre, bajo a la capilla contando los escalones. Compruebo, con satisfacción, que no hay ni uno más ni uno menos. 

Preparo el altar y me entrego a la consideración de las oraciones de la misa de hoy: Santa María Madre de la Iglesia. 

8:03

Empieza con tres minutos de retraso la misa de ocho. 

8:30

Recojo todo y preparo los libros para la misa del miércoles. 

Oficio de lectura. 

9:15

Salgo para San Miguel. 

9:40

Llego a San Miguel, aparco en el garaje y subo a la sacristía. Abro la puerta de la sacristía y veo que llega Joan. Nos saludamos. Ella entra en la sacristía y yo voy a la casa abadía y, luego, al banco. 

10:30

Voy al confesonario. 

Laudes: Himno Quae caritatis fulgidum. 

Estoy terminando el himno cuando se abre violentamente la puerta del confesonario. Es Bernardo que viene a desearme la Paz de Dios, a contarme que, a veces,  nota frio en las rodillas, a decirme que está muy contento en su casa de la calle Del Calvario, a preguntarme que si estoy contento con mi trabajo y a pedirme que no me vaya de San Miguel. 

Voy a reanudar las Laudes cuando suena el telefono. Adios laudes. Es A, del obispado. Que el ecónomo está revisando las cuentas del año pasado y necesita cierta información. Le doy la información que tengo a mano y quedo en llamarla después de misa para darle la información que no tengo a mano.

Un penitente. Muy bien.

11:00

Segunda misa de la Virgen Madre de la Iglesia. 

11:40

Mensaje de la aseguradora. Que han devuelto del banco el recibo del seguro del coche. Urge aclararlo pero, primero, tengo que buscar la información que he prometido darle a A. 

Teresa se despide de mi y me dice algo pero mi cabeza está en el seguro del coche y en la información que pide el ecónomo de modo que creo que le digo «adiós» dos veces y  no respondo a su pregunta. 

Sin despedirme de Joan, voy a la casa abadía y busco la carpeta de las facturas del año pasado. La hallo. Busco la información que me piden. La hallo. Llamo al obispado. Un contestador automático me informa de los horarios de atención y me comunica que, a continuación, me atenderá un ser humano. El ser humano que me atiende es Óscar. Nos saludamos. Le pido —por favor— que me ponga con A. Me pone con A y le doy la información que me pidió. 

Hay que resolver lo del seguro del coche. El mensaje que me  han enviado incluye un vínculo para descargar una carta. La descargo y la leo. Es una carta muy amable en la que la aseguradora me agradece sinceramente la confianza que he depositado en ella y me recuerda que, si no pago en breve, me quedaré sin seguro. 

Voy a la correduría del seguro. Pago en metálico y me dan un recibo. 

Mensaje a Wilder. 

12:55

De regreso a casa rezo, por fin, laudes. 

13:11

Encuentro una llamada perdida de María José. Le devuelvo la llamada. Que está en la calle y que me llama ahora. 

Veintidós mensajes de WhatsApp. 

Alfredo: que el viernes hay reunión con la junta mayor de cofradías. 

13:15

Maria José me devuelve la llamada. La saludo y suena el timbre del despacho parroquial. Es Sergio, el maestro relojero. Le digo que lo atenderé enseguida. 

13:17

Me despido de María José y atiendo a Sergio. 

13:35

Me despido de Sergio. Contesto al wasap de Alfredo. 

Wasap de Yolima. Que le están preguntando que si el Corpus se celebra en Torremendo el sábado o el domingo. Que el sábado. 

Wasap a la alcaldesa pedánea de Torremendo. Wasap de la alcaldesa pedánea de Torremendo. 

Wasap a la lista de difusión de Torremendo anunciando que la misa se celebrará el sábado 25 de mayo a las 19:00 y que, a continuación, será la procesión del Corpus. 

Wasap a la Junta de Cofradías convocando la reunión del viernes. 

Miles de wasaps de los vecinos de Torremendo manifestando su perplejidad por mi anuncio anterior. Nuevo Wasap a la lista de difusión de Torremendo: que no es el sábado 25 de mayo sino el sábado 1 de junio. 

Tercia. 

14:05

Voy a comer a casa de doña Nati. 

Wasap del arcipreste. Que si tengo apuntada una misa en Los Montesinos el viernes a las 20:00. Que no. 

Comemos doña Nati, Samira y yo. 

Tengo un paquete de Amazon. ¿Qué será? Lo abro con curiosa impaciencia pero fingiendo una gran calma para que no se me note la curiosa impaciencia. Es la tinta para la impresora del archidiácono. Wasap al archidiácono. 

14:40

Me despido de doña Nati y de Samira y voy a la iglesia para hacer  la visita al Santísimo. 

Al salir de la iglesia me encuentro en El Paseo con Antonio C, con su esposa —Amabilidad— y con Analía. Nos saludamos y charlamos. Estamos en ello cuando recuerdo que tengo que ir a la farmacia. Busco la receta en la casa parroquial y la hallo.

14:57

Voy a la farmacia. Charlo con la farmacéutica. Me cuenta que se va a Madrid y a Salamanca. Voy a decirle que por qué no me lleva con ella, pero no se lo digo. 

15:05

Vuelvo a la casa abadía y veo las noticias en Antena 3. Wasap del arcipreste. Que si puedo celebrar el viernes en Los Montesinos. Que sí. 

15:31

Anoto en mis cuentas 8 euros de farmacia. 

Para sacudirme la somnolencia me entrego al aseo de la casa. 

Envío algunas fotos a algunos amigos.

16:30

Voy a la iglesia para hacer un rato de oración. 

De camino me encuentro con Iván —el belga— que está haciendo algunas reparaciones— y con Teresa que quiere decirme dos  cosas: me  dice primero una y, luego la otra. 

16:35

Meditación en la iglesia. 

17:10

Wasap de Tatiana. Que hoy no es un buen día para llevarle la comunión a Ana. Llevo  la comunión a doña Nati.

17:30

Llamo a Rosario A. Charlamos. Le llevaré la comunión mañana, si Dios quiere.

17:40

Me aplico a la preparación de la catequesis sobre la historia de la Iglesia en España. 

18:48

Vísperas. Himno Virgo Mater Ecclesiae.

19:03

Wasap a Teresa. Que el viernes confesaré a los  niños a las 19:00 y saldré pitando para Los  Montesinos.

Respondo a un wasap que JAVP me mandó el 7 de mayo. 

Me llama el párroco de Aguadulce por el asunto de Iván, el belga. Charlamos. 

19:23

Leo el capítulo de Ejecutoria intitulado So Far We Are Equal. De las cinco novelas de Jean Austen que cita don EGM en este capítulo —Amor y Amistad, Northanger Abbey, Emma, Orgullo y prejuicio y Sentido y sensibilidad— solamente he leído las dos últimas. 

Capítulo a cápitulo crece la lista de libros que no he leído y de libros que tengo que releer a la luz de la lectura que ha hecho de ellos don EGM, tan perspicaz. 

Durante la lectura del capítulo ha estado incordiándome un mosquito Fumigo el despacho y me voy al cuarto de estar para leer diez páginas de La Nueva Jerusalén, de Chesterton. 

20:01

Voy a casa de doña Nati para ver otro capítulo de The Crown.

En El Paseo hay un duelo a espadas de luz. A mi izquierda, por el Poniente, el sol aún campea. A mi derecha que da al Norte, la fachada de la Iglesia, que mira hacia el sol, resplandece con su albero brillantísimo y vence al sol.   

Ya en casa de doña Nati, es de ver cómo, cada cinco minutos, alguien llama por teléfono o viene a ver a doña Nati. Y es de ver cómo, cada cinco minutos, detenemos la serie para que doña Nati pueda atender como una reina a los que la llaman por teléfono  —cinco o seis en media hora— y a los que vienen a verla  o a  regalarle cosas. 

Cuando viene su nieto Pablo —que  está muy delgado— se le alegran los ojos y  el alma y se le quitan  de encima diez años. ¡Adiós The Crown!  

A eso de las 21:00 llega la última visita y no hemos visto ni la mitad del capítulo de la teleserie o como se diga. 

Los últimos visitantes son Ana Isabel y Wilder. 

A doña Nati y a mí se nos iluminan los ojos. ¡Adiós The Crown! Empezamos a charlar recordando cosas amables y no paramos de reír. 

22:45

Samira se ha ido a dormir hace un buen rato. Ana Isabel, Wilder y yo nos despedimos de doña Nati y nos vamos conversando por  los codos hasta que llegamos a la iglesia. Allí me despido  de Ana Isabel y de Wilder que siguen su camino a casa. 

Yo voy a la iglesia porque hay que rezar completas entre risas. 

Luego apago las luces de la iglesia y cierro las puertas  y me quedo un rato  contemplando la Cruz de Mayo adornada con flores: «Jamás el bosque dio mejor tributo  en hoja, en flor y en fruto». 

Y vuelvo, risueño —como un gorrión madrugador de San Miguel— a la casa abadía para dejar constancia en mi diario de las magnalia Dei,  o como se diga en el lenguaje de los gorriones buenos esa bondad graciosísima de Dios.