martes, 22 de julio de 2025

Diario. Martes, 22 de julio de 2025

 San Miguel de Salinas

martes, 22 de julio de 2025


5:00

Me despierto. 

Saad Issa Kostandi Salameh era el conserje de la parroquia de la Sagrada Familia de Gaza. Murió el pasado 17 de julio a los sesenta años de edad a consecuencia de la explosión de un proyectil lanzado por el ejército israelí. 

Oficio de lectura de la fiesta de María Magdalena. 

Me acuesto pero no consigo dormirme. 

Nietzsche dijo alguna vez que la religión cristiana es una cosa femenina. A él, claro, eso le parecía un insulto. 

8:00

Me levanto. Me tomo un café con leches y un antiinflamatorio.

9:00

Voy a la iglesia y me siento para mirar fijamente al sagrario. La parroquia de la Sagrada Familia de Gaza acoge a unos seiscientos refugiados cristianos y musulmanes. Imagino que Saad Issa Kostandi Salameh, el conserje, tendría bastante trabajo. 

Ahora tienen un agujero en el tejado y no tienen conserje y tienen al párroco con una pierna herida. Supongo que andará cojeando, como yo. 

Cuando —a eso de las diez de la mañana— cayó la bomba, Foumia Issa Latif Ayyad, una mujer palestina y cristiana, estaba recibiendo atención en una tienda de Cáritas parroquial. Ahora está muerta. 

9:15

Laudes.

Mujer, ¿por qué lloras?

9:40

Despejo la mesa de la sacristía en la que puse, ayer, los víveres que hoy se llevará Zakarías. Registro los libros para la misa. 

10:00

Llega Joan. Charlamos. 

Me siento en el confesonario con aire acondicionado y todo. 

Estudio I Reyes 1, 1-8. Adonías trama una rebelión contra su padre, David, que ya está viejecito y que ha decidido que el reino lo herede Salomón. 

Lectura de 1 Crónicas. 

Tercia.

11:00

Misa de la fiesta de santa Maria Magdalena. 

11:40

Llega Zakarías. Me ayuda a subir las botellas de vino de misa del garaje a la sacristía. Se lleva una bolsa con los víveres que ofrecieron los cofrades de la Virgen del Carmen. 

Me voy con Joan al Collie. Ella toma una café con leche en vaso y con sacarina. Yo una Coca-cola sabor original. 

12:05

Rezamos el ángelus y nos despedimos. 

Voy a la casa abadía y pongo una lavadora. 

Bajo al despacho de Cáritas para poner orden y para buscar cosas. Encuentro casi todo lo que buscaba pero no pongo mucho orden. 

Escribo a los de la administración del cementerio porque las cuentas que me han mandado no cuadran con las mías. 

Archivo papelitos del banco y tiro un montón de papeles. 

13:00

Tiendo la ropa. 

Me llama Carlos: charlamos. 

Desinsecto los salones parroquiales y recojo allí los cadáveres de seis —6— cucarachas. 

14:00

Como no está doña Nati, me preparo una comida oyendo Adictos a la filosofía. 

Después de comer y de recogerlo todo me siento para oír música mirando al techo. Cuarteto para cuerda nº 12 de Beethoven. 

16:00

Me tomo un antiinflamatorio y voy a la iglesia para rezar los misterios dolorosos. Antes enciendo todos los ventiladores.

Una familia polaca entra y me pregunta por la historia de la iglesia. Comienzo mi cuento con la rebelión de Adonías contra el anciano David. 

Luego nos despedimos y sigo con el rosario. 

16:45

Me siento para mirar fijamente al sagrario. 

Najwa Ibrahim Latif Abu Daoud estaba rezando en la parroquia de la Sagrada Familia de Gaza cuando cayó sobre ella el proyectil del ejército israelí. 

Israel ha lamentado mucho el suceso. Dicen que no dispararon a propósito sobre la iglesia. Imagino que ya se habrán encargado de reparar los destrozos y de indemnizar a las víctimas. 

El Papa rezó ayer por los tres difuntos. 

17:15

Lectura de los Sermones Parroquiales, de Newman. 

17:30

Vuelvo a la casa abadía. La ropa ya está seca. La recojo y la guardo. 

17:50

Escribo esto. 


18:30

Me tomo una limonada y una galleta. 

Borro unos diez correos y contesto a uno. 

Me aplico a la lectura de los boletines, cartas, documentos y memoriales que han llegado de la curia y del arciprestazgo. 

Wasap del arcipreste: que si puedo celebrar el jueves 31 y el viernes 1 en su parroquia. Que sí. 


19:39

Voy a Más y Más. 

Al volver me encuentro con Ana Isabel y Wilder que van a tomar un agua de Vichy en el Collie. Me uno a ellos. 

20:40

Nos despedimos. Les pido que, cuando terminen, cierren la iglesia que se está refrescando. 

Voy a recoger la compra que he dejado en el garaje y me adelantan unos muchachos de unos dieciséis años. Cuando abro el garaje se detienen, se vuelven hacia mí y uno de ellos, el más alto, señalando un rosario que lleva al cuello, me pide que se lo bendiga. Bendigo el rosario, bendigo al muchacho y, luego, sacudimos nuestras manos. 

21:30

Termino de cenar y de recogerlo todo. Escribo esto.

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