jueves, 14 de agosto de 2025

Diario. Miércoles, 13 de agosto de 2025

 San Miguel de Salinas

miércoles, 13 de agosto de 2025


7:00 Abro la iglesia y salgo para el hospital. 


Misa de 7:40 en el hospital y de 11:00 en San Miguel. Luego café en el Collie con Joan, Laura y David que acaba de volver de Inglaterra. 


Doña Nati está mejor de su herpes pero sigue sin salir de casa. 


Encuentro en el buzón cartelería fina, muchas cartas del banco y tres del obispado. Estas últimas requieren mi atención. Sobre todo una que trae el expediente para la boda de de Kevin y Emma, de la diócesis de Cork and Ross (Dioecesis Corcagiensis  et Rossensis), Irlanda. 


Rashomon, Akira Kurosawa, 1950. 


Ana Isabel y Wilder me invitan a cenar en su casa. Muy bien. 


22:00 Completas. Cierro la iglesia y apago las luces. 

martes, 12 de agosto de 2025

Diario. Martes, 12 de agosto de 2025

 San Miguel de Salinas

martes, 12 de agosto de 2025

Días de agosto augusto y lento en San Miguel. 

Misa de santa Juana Francisca de Chantal. 

No ha venido doña Nati y Joan entra en la sacristía y me muestra, en la canastilla de la colecta, un billete de cincuenta euros. ¡Albricias!

Me llama doña Nati. Que tiene un herpes zóster o culebrilla pero que no le duele mucho. La doctora le ha dicho que es el virus de la varicela. Quedamos para vernos a la hora de comer. 

Por la tarde, retiro en el hospital. Siete penitentes. Muy bien. 


Si estos callan... 

Abascalix ha mostrado —con mucho respeto— su perplejidad ante una parte, una parte insisto, de la jerarquía… Sería lindo que, ahora, el presidente de la CEE, en su calidad de buen pastor,  lo invitara a tomar un té con pastas, le mostrase su afecto paternal y le explicara que no tiene nada que temer de la jerarquía eclesiástica. Y sería lindo que, tras el encuentro, ambos puideran hacerse una foto así.

lunes, 11 de agosto de 2025

Diario. Domingo 10 y lunes 11 de agosto de 2025

 La Torre

domingo, 10 de agosto de 2025


Último día en la Torre, misa del día con la ermita llena. Breve homilía por ser tiempo de melones. 

Patricia me invita a cenar a la Casa Grande. 


San Miguel de Salinas

lunes, 11 de agosto de 2025



A las ocho y media o así digo «adiós» a La Torre donde todos duermen. 

Vuelta a Sa Miguel y a la maravillosa rutina de un cura de pueblo. Hay que ir al banco, celebrar la misa de once, preparar el retiro de mañana… 

Como en casa de doña Nati.

Por la tarde me llama el arcipreste: que si puedo ir al hospital para dar la unción a una paciente. Que sí, que claro. 

Y voy al hospital y encuentro allí a Mari y a su hija Maria del Mar, de Guardamar. ¡Santas mujeres! Entre ellas hablan en valenciano y, aunque les digo que me hablen también a mí en su lengua, no les sale. Mari dice que está dispuesta a morir cuando Dios quiera porque aquí ya no tiene nada que hacer. Su hija entonces le dice algo así como: Tens que viure pa donarme alegría. Y Mari se ríe un poco 

El pueblo está semidesierto en agosto. Cierro la iglesia a las nueve y escribo esto. 

domingo, 10 de agosto de 2025

Diario. Sábado 9 de agosto de 2025

 La Torre

sábado, 9 de agosto de 2025


Penúltimo día en La Torre, misa de Santa Teresa Benedicta de la Cruz. 

A la hora de comer somos veintinueve: dos mesas redondas de diez y una mesa alargada para nueve.

Caminata con Pepe y Almudena FV de siete y media a nueve 

sábado, 9 de agosto de 2025

Diario. Viernes, 8 de agosto de 2025

 La Torre

viernes, 8 de agosto de 2025


00:10

Wasap de Alí desde Macedonia. Que ramona ha ingresado por urgencias en el Quirón. 

05:00

Me despierto, me levanto, rezo el oficio de lecturas y me acuesto. 

7:30

Me levanto y me zampo un café con horchata. Empieza el día



A las once y media salgo para San Miguel. Voy a aprovechar para ingresar el dinero de las colectas de la semana pasada. Ya está. 

Voy a ver a Ramona. La atiende el doctor JR. Está en las mejores manos. Me encuentro con el doctor S. Como me ve toser, me recomienda Bisolvón antitusivo. 

Vuelvo a La Torre pasando por la farmacia para lo del Bisolvón. Enfrente de la farmacia descubro una tienda nueva: compro dos botellas de vino, una de vermut artesanal y una bolsa de torreznos. Me regalan una cajita de rocas de turrón de Jijona. 



Primera dosis de Bisolvón. Nacho y Borja me preguntan que qué es, se lo explico y les digo que ellos no lo pueden tomar. Lo dejo en un armario, me doy la vuelta e Ignacio aprovecha para hacerse con el frasco. Se lo arrebato antes de que consiga darle un tiento. 



A petición de Pepe, que quiere salir a caminar, adelantamos la misa a las siete. 

Luego me voy a caminar con Pepe. Setenta minutos de caminata, cinco kilómetros. Muy bien. 

Ducha y cena. 

Segunda dosis de Bisolvón. 

jueves, 7 de agosto de 2025

Diario. Jueves, 7 de agosto de 2025

 La Torre

jueves, 7 de agosto de 2025


I

Leo en X un hilo de Enrique Navarro: Uruguay fue el primer país que reconoció la II República española y, también, el primero que rompió relaciones diplomáticas con ella cuando las hordas marxistas sembraron el terror en Españita y provocaron una sangrienta guerra civil. 


II

Agradecimientos


Escribo a Pedro R para agradecer el maravilloso parfum d’intérieur que me ha enviado por medio Patricia.


Grabo un audio para Jaime agradeciendo y recitando la maravillosa poesía que me ha mandado. 


Escribo a Pablo FdCV agradeciendo el ejemplar de La hazaña secreta, que me dedicó y regaló. 


III

Los jóvenes se han ido a cenar a la playa.

En La Torre, a las ocho, misa. Luego cena en el patio. 


IV

¡Pobre Moisés que, después de tanto pelear, se quedará a las puertas de la Tierra Prometida!

Mañana empezaremos con el Deuteronomio. 

Diario. Miércoles, 6 de agosto de 2025

 La Torre

miércoles, 6 de agosto de 2025


I

¡Pobre Moisés! 

El pueblo anda lloriqueando: Cómo nos acordamos del pescado que comíamos gratis en Egipto, y de los pepinos y melones y puerros y cebollas y ajos. (Lunes)

María y Arón murmuran contra él. ¿Es que el Señor solamente ha hablado a Moisés? ¿Acaso no nos ha hablado también a nosotros? (Martes)

Algunos exploradores de Canaán vuelven diciendo que es una tierra que devora a sus habitantes y el pueblo se asusta y —otra vez— llora durante toda la noche. (Hoy, miércoles)

¡Pobre Moisés! ¡Ay de aquel que quiera ponerse al frente de nosotros si no nos garantiza los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas…! ¡Ah, y los ajitos!


II

¡Pobre Jesús! 

Está Él transfigurándose y hablando de su Pasión con Moisés y con Elías y, entre tanto, Pedro: «¡Uy, qué rebién que se está aquí!». 

III

A las ocho de la tarde celebramos en La Torre la misa de la fiesta. 

A las ocho y media me voy a cenar con Mariana, con su hermano Alex y con el amigo de ambos, Alex 2, que vienen de Connecticut; con Ignacio que viene de Roma, del jubileo, y con Bea.  

A Bea, la más joven, le proponemos dos retos. Uno: «¿te atreves a levantarte y pedirle al camarero que nos traiga la carta de postres?». Bea se atreve. Dos: «¿te atreves a preguntarle al camarero de dónde es?». Bea se atreve. El camarero es venezolano. 

Durante la cena hablamos:

1. Del asteroide 16 Psyche.

2. Del jubileo. Emotiva crónica que nos hace Ignacio. 

3. De la Universidad de Pensilvania donde Mariana va a empezar astrofísica, o algo así.

4. De un muchacho —Michael, neoyorquino y de ascendencia rusa— a cuya simpatía es sensible Mariana. 

5. De los inventos que hace Alex y que pone en YouTube para enseñar a otros muchachos algunos rudimentos de electrónica y eso. 

6. De la ascendencia de Alex 2 que nos lleva a viajar desde Canadá hasta Chile, pasando por México, Panamá, Colombia y Brasil. 

Después de la cena volvemos a La Torre y nos unimos a la tertulia en el palmeral. 

Yo me despido a eso de las once y media. 

Diario. Martes, 5 de agosto de 2025

 La Torre

martes, 5 de agosto de 2025


A las siete y media salgo de La Torre y a las ocho y veinte estoy en mi asiento del AVE que va a llevarme a Madrid. 

El viaje dura, exactamente, dos horas y media. Un taxi me lleva a la cooperativa del clero donde me espera don Juan Carlos. 

Compro formas y dos camisas y voy con don JC a una cafetería cercana en la que charlamos durante hora y media. 

A eso de la una nos despedimos y voy a casa de Arantxa. Encuentro allí a Jesús, a Ana, a Blanca y a Javier. 

Comemos, charlamos y, después de una siesta, reanudamos la tertulia. Javier consulta con su madre las reformas de la casa que acaba de comprar. 

Jesús y Ana salen a pasear y a hacer compras.

A las ocho menos cuarto sale el AVE para Alicante. Voy dentro. Llego a Alicante a las diez y veinte. A las once menos veinte estoy celebrando en La Torre la misa de la dedicación de la basílica de Santa María, sí: la Virgen del las Nieves. 

martes, 5 de agosto de 2025

Diario. Lunes, 4 de agosto de 2025

 La Torre

lunes, 4 de agosto de 2025


I

Me despierto a las cinco y me preparo un café con leches. A las seis menos cuarto pongo una lavadora. A las seis estoy en la ermita. La Torre está silenciosa: todos duermen. 

A las seis y media me preparo otro café y una tostada con jamón. Luego tiendo la ropa. 

II

Compro un billete de tren de ida y vuelta a Madrid para mañana. 


III

A las diez, misa de san Juan María Vianney. Es el cumpleaños de Íñigo y el quincuagésimo primer aniversario de ordenación de Juan Manuel, que en paz descanse. 


IV

Voy de compras a Torrellano con Bea y Borja. 


V

A la hora del café, llega de Madrid Iciar. Muac, muac, y todo eso. Luego le doy un buen meneo a Mil ojos esconde la noche. 


VI

Ceno en la Casa Grande con Elena, Rafa, Marta y Valen. 

lunes, 4 de agosto de 2025

Diario. Domingo, 3 de agosto de 2025

 La Torre

domingo, 3 de agosto de 2025


I

Agenda de hoy


9:30

Confesiones en Torremendo

10:00

MIsa en Torremendo

12:00

Confesiones en San Miguel

12:30

MIsa en San Miguel 

14:00

Salir para La Torre

19:30

Misa en La Torre


II

Un penitente en Torremendo, muy bien. 


III

Homilía en San Miguel


Empiezo a predicar buscando caras. Joan y Laura me miran atentamente pero sé que no entienden ni patata de lo que estoy diciendo. Maruja, a su lado, me mira con bondad pero juraría que no me oye. 

David, desde luego, no me oye y, aunque me oyera no entendería nada porque, como Joan y Laura, no habla español.

Andrés está trasteando en el órgano ajeno al predicador. 

Hay tres familias de extranjeros que miran con curiosidad y seguramente tampoco entienden ni jota de español. 

Por fin, hacia la mitad de la iglesia descubro la cara sonriente de Sonia. Cabe ella, otra señora da muestras de estar siguiendo con interés el hilo de la predicación. Me concentro en ellas y, justo entonces, la señora se levanta, recoge su bolso, sale al pasillo central abriéndose paso por delante de sus compañeros de banco y se va. 

Yo sin desanimarme: «¡Adelante, Vicens!». 

Al terminar la homilía, Andrés me da el tono para el Credo de la Misa de Ángelis.


IV

Me despido de Joan, de Laura y de David. Joan me recuerda que debo llevarme mis medicamentos a La Torre. Se lo agradezco pero salgo para La Torre sin mis medicamentos. 

Paro en El Realengo para repostar: 75 dólares. 


V

Después de comer, Rosario y Pilar vuelven a Madrid. Misa a las 19:30 en La Torre.


VI

A partir de mañana, la primera lectura se toma del libro de los Números. Este libro va a ocuparnos cuatro días, del lunes al jueves, y va a recordarnos las pruebas del paciente y humilde Moisés. 


VII

Ceno en el patio con los niños. Les enseño un video en el que se enfrentan un oso hormiguero y un leopardo. Ellos me enseñan los dientes y los huecos que han dejado los dientes que se han caído. Estamos empatados.